No te obsesiones con buscar información e ideas en blogs o webs de terceros. Antes de optar por esta opción, te recomendamos revisar tu propio contenido.
En muchas ocasiones, escribimos artículos genéricos, sin centrarnos en un tema. Puedes utilizar este tipo de artículos, y extraer información para escribir varios artículos más específicos.
Comienza desarrollando cada punto, tratándolo en detalle y así podrás escribir especializándote en un solo tema.