Descripción

Es un medio con personalidad propia y criterios informativos propios. Sin dependencias con ninguna cabecera de cualquier otro ámbito: un periódico con sede en Euskadi, periodistas en Euskadi y visión y contenidos para los lectores del País Vasco. Profesionales acreditados, con larga experiencia en medios de comunicación, actitudes independientes y solvencia y rigor incuestionables. Crónica Vasca contará tanto con periodistas y colaboradores experimentados como con jóvenes valores de la profesión.

Crónica Vasca se declara un medio independiente, social, moderado, integrador, respetuoso con a la pluralidad y la defensa de los valores democráticos. Se compromete a separar con claridad la información y la opinión. Está abierto a todas las corrientes de pensamiento. Sus lectores potenciales se encuentran en todo el mundo interesado en conocer de forma analítica qué sucede en Euskadi.

Hasta hace poco, los medios fueron de empresarios. Internet ha facilitado que también sean de sus profesionales. Crónica Vasca es un ejemplo de periodistas detrás de empresas periodísticas. Nuestros intereses son los los principios básicos del periodismo: cuestionar y contrastar la información.

Crónica Vasca muestra las claves económicas a través de todos sus agentes: empresarios, sindicatos, instituciones, entidades y ciudadanía.

Crónica Vasca ofrece las claves de la actualidad a través de noticias serias y rigurosas y de la opinión separada claramente de la información y emitida por expertos en cada materia.

Crónica Vasca informa de la actualidad política de Euskadi. Centrada en los partidos políticos e instituciones y los colectivos y los movimientos sociales.

Tiene una línea editorial moderada e independiente y está centrado en la política, economía y empresa. No está sujeto a los intereses publicitarios y nace con vocación de permanencia, respeto a la pluralidad y defensa de los valores democráticos.

Crónica Vasca se financia a través de la publicidad y los lectores. Rechaza cualquier forma de financiación opaca o que incluya condiciones editoriales. El mercado y los lectores deben ser los auténticos garantes de la información de calidad, del periodismo valiente que practicaremos.